
Gestos con las manos
La mayoría de las personas son conscientes del movimiento de manos de los demás, pero en general lo ignoran, sin embargo estos movimientos contribuyen a aclarar cuando un dialogo es difícil de entender.
La palma de la mano
El gesto de exhibir las palmas de las manos se ha asociado siempre con la verdad, la honestidad y la lealtad. Muchos juramentos se efectúan colocando la palma de la mano sobre el corazón; la mano se levanta con la palma hacia afuera cuando alguien declara en un tribunal. En la vida cotidiana, la gente usa dos posiciones fundamentales de las palmas: una es la de las palmas hacia arriba en la posición del mendigo que pide dinero o comida, y la otra es de las palmas hacia abajo como si se tratara de contener, de mantener algo.
Cuando alguien empieza a confiar en otro, le expondrá las palmas o partes de ellas. Es un gesto inconsciente como casi todos los del lenguaje del cuerpo, un gesto que proporciona al que lo ve la sensación o el presentimiento de que están diciéndole la verdad.
Hay tres gestos principales de mando con las palmas:
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La palma hacia arriba es un gesto no amenazador que denota sumisión.
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Cuando alguien coloca la palma hacia abajo adquiere inmediatamente autoridad. La persona receptora siente que se le está dando una orden.
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La palma cerrada en un puño, con el dedo señalando la dirección, es el plano simbólico con el que uno golpea al que lo escucha para hacer que le obedezca.



Apretón de manos
Existen diferentes maneras de estrechar una mano dependiendo del lugar en el que se encuentre la persona pero estos movimientos son generales para el saludar con la mano o despedirse.
Apretones sumisos y dominantes
Relacionado a lo expuesto antes sobre lo que significa las manos ya sea hacia arriba o hacia abajo, ambos movimientos entran en juego con el apretón de mano. Supongamos que nos acaban de presentar a alguien y se realiza un apretón de manos. Tres actitudes pueden transmitirse en el apretón:
La actitud de dominio: «Este individuo está tratando de someterme. Voy a estar alerta.»
La de sumisión: «Puedo hacer lo que quiera con esta persona.»
Y la actitud de igualdad: «Me gusta, nos llevaremos bien.»
El dominio se transmite cuando la palma queda hacia abajo. No es necesario que la palma quede hacia el suelo; basta con que esté hacia abajo sobre la palma de la otra persona. Esta posición le indica a uno que el otro quiere tomar el control.
La inversa del apretón dominante es ofrecer la mano con la palma hacia arriba. Este gesto resulta especialmente efectivo cuando se desea ceder al otro el control de la situación, o hacerle sentir que lo tiene.
Cuando dos personas dominantes se estrechan las manos tiene lugar una lucha simbólica, ya que cada una trata de poner la palma de la otra en posición de sumisión. El resultado es un apretón de manos vertical en el que cada uno trasmite al otro un sentimiento de respeto y simpatía.
Diferentes gestos con las manos
Manos con los dedos entrelazados
Al principio puede parecer que éste es un gesto de bienestar porque la gente que lo usa a menudo está sonriendo al mismo tiempo y parece feliz. Pero realmente es un gesto de frustración o la persona que lo hace está disimulando una actitud negativa.
Manos en ojiva
La persona que se tiene confianza, que es superior, o la que usa mínima gesticulación, con frecuencia hace este gesto, y con él expresa su actitud de seguridad. También es un gesto común entre los contadores, abogados, gerentes y otros profesionales.
Las manos en la cara
¿Cómo puede saberse que alguien está mintiendo?
Las posiciones de las manos en la cara son la base de los gestos humanos para engañar. Cuando alguien hace un gesto de llevarse las manos a la cara no siempre significa que está mintiendo, pero indica que esta persona puede estar engañando (tiene que observarse los siguientes movimientos después del gesto de la mano en la cara para así no cometer errores).



